Generales

La Necesidad del Ser Humano. Artículo de opinión.

Escrito por Yerlin Navarro Fallas.

Estudiante de la Universidad de Costa Rica, Sede Occidente.

Curso de Repertorio: Problemas Ecológicos.

El ser humano ha disparatado el sentido del concepto necesidad, debido a esto, se ha creído erróneamente, por razones de socialización, y por ende, todo lo que demanda este proceso, que todos los recursos existentes son indispensables para la supervivencia, pero ¿será verídico que todo lo que se posee, y dependiendo de las condiciones, lo que no se posee, pero que aun así, se opera para obtenerlo, representa una gran necesidad para el desarrollo vital?, ahora bien, por medio de esta interrogante, se reitera la idea de los procesos socializados, como aquella causa de la distorsión de dicho concepto, por lo cual, con el paso del tiempo, el ser humano dejó de buscar aquellos elementos que únicamente satisfacían las necesidades vitales, sino, que empezó a llenar aquellos vacíos secundarios, que permitían que el individuo fuera parte de una sociedad, o que este se sintiera parte de él, desde ahí, se empezó a visualizar  la separación del hombre con la naturaleza,  solo buscaba satisfacerse. En efecto, existe una estrecha relación con la globalización y el capitalismo, siendo cada uno de estos procesos, el núcleo, en donde se alimenta la explotación, de los recursos proporcionados por la naturaleza.

Ahora bien, al hacer esta relación, distorsión del concepto de necesidad y globalización-capitalismo, se podría ejemplificar con hechos históricos, tal es el caso, la dominación de tierras, mencionando específicamente, por estar presentes en su historia, la colonización. De ahí, se analizan estos acontecimientos, destacando el poderío de las sociedades indígenas antepasadas y actuales, con respecto a los recursos naturales, relación que se presentaba y aún se presenta, con una gran inteligencia ambiental, al tener la capacidad de tomar la naturaleza en sus manos, pero, midiendo la necesidad vital para ambos, porque creían en la importancia de mantener una relación de bienestar con el medio que los rodeaba, llenando así, vacíos secundarios, los cuales, por esos procesos socializados, e igual, por la modernización que se ha inculcado en el pensamiento indígena, actualmente, se están llenando con el capitalismo y los procesos globalizadores, o sea, con un producto, tales como, aparatos y servicios, que han sido extraídos de la materia prima, proveniente de la naturaleza.

Es decir, la búsqueda de este capital, conduce al ser humano, únicamente, a operar en función de la necesidad de él mismo y no la del entorno, como se ha expuesto; por lo que, en este divorcio con el medio ambiente, el individuo con mayor capacidad de razonar, dentro del reino animal, es el que se está beneficiando, como un parásito, de todos sus recursos; lastimosamente, este daño repercute de manera indirecta, o sus efectos surgen lentamente, impidiendo así, hacer conciencia de la pérdida. Por lo tanto, el  resultado es el  consumismo, consecuente del capitalismo, del cual se genera mucho material, que el ser humano catalogaba, en su momento, como necesario, pero,  al ya no satisfacer la necesidad secundaria, ya sea de uso o consumista, debe ser eliminado, produciendo así, grandes cantidades de desechos y residuos, estos últimos, con la capacidad de ser reciclados, pero, que en algún momento dejarán de ser funcionales.

Asimismo, como parte de esta socialización y la necesidad de estar inmersos en ella, el ser humano, pretende dar a conocer ese capital que tiene, mientras más posee, un mayor reconocimiento, siendo, este comportamiento, de carácter inconsciente, provocado por ese mismo capitalismo, un ejemplo de esto, es el hecho de cambiar el automóvil por uno nuevo, así como también, los aparatos electrónicos, como el teléfono, las pantallas, igualmente, prendas de vestir, zapatos y demás productos que, consumimos y que terminarán en algún momento en los vertederos de basura, además, del gasto eléctrico que generan y otros efectos negativos. La crítica sobre  esta idea del consumismo (procedente del inconsciente, por la normalización en que se encuentra), es que impide cambiar a un pensamiento ecológico y así crear comportamientos aliados con el ambiente. Este cambio se ha estado visualizando desde hace algunos años, aunque no hay una relación equivalente con la cantidad de repercusiones que han surgido por la explotación de los recursos naturales.

Otra problemática que genera este capitalismo, está relacionada con el proceso histórico de la colonización que se mencionaba anteriormente; a pesar de que, en la actualidad no se ejerce un dominio estando en desacuerdo la contraparte, aún existen esos poderes, en este caso económicos,  que aprovechan los recursos naturales de los otros países, para abastecer sus necesidades económicas, afectando así, también el ambiente natural, por medio de edificios y demás servicios que ofrecen. No obstante, cada uno de estos proyectos deben cumplir con ciertas reglas, aunque, terminan afectando algunos elementos del entorno, un ejemplo de estos casos, son algunas playas del país; la visión que se le da, con estos proyectos extranjeros, es que son importantes para el desarrollo económico, es decir, de nuevo se estaría distorsionando el concepto de necesidad, puesto que, la vida del ser humano no depende del dinero para vivir, o de la producción económica en masa.

Por otro lado, algunos de los países involucrados en estos proyectos, están tan industrializados e inmersos en el capitalismo o la globalización, que buscan nuevas estrategias de desarrollo, por lo que les interesan estos recursos naturales, no obstante, en Costa Rica, también se pretende generar progreso económico, como en la Gran Área Metropolitana, donde se presentan las mayores edificaciones e industrias, las cuales, en ciertos aspectos se encuentran en esa relación de divorcio con el medio ambiente. De esta manera (aunque se está inmerso en esta problemática consumista, de la cual, se vuelve prácticamente una adicción y de la que es difícil salir) hay que encontrar estrategias, que permitan que los efectos de estas acciones no vayan a perjudicar las verdaderas necesidades básicas del hombre, o no esperar la repercusión, sino, el buen desarrollo como alternativa ambientalista, desde la creación de los productos o servicios que son secundarios para la vida, al igual, este cambio inicia desde una perspectiva muy propia, generando así, una encadenamiento de conocimiento ambiental, al ser individuos socializados.

Imagen con fines ilustrativos.

Yuri Fallas A.

Comunicadora generaleña desde el año 2012, co directora de PZ Actual, corresponsal de Canal 7.

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